"Muchas veces ha ocurrido también, dijo Austerlitz, que los pájaros se extravíen en el bosque de la biblioteca, vuelen hacia los árboles reflejados en los cristales de la sala de lectura y, tras un golpe sordo, caigan sin vida al suelo. Desde mi lugar en la sala de lectura he pensado mucho en la relación que tienen esos accidentes, no previstos por nadie, es decir, la muerte súbita de un ser desviado de su rumbo natural, lo mismo que los fenómenos de paralización del sistema electrónico de datos, que se producen una y otra vez, con el cartesiano plan general de la Biblioteca Nacional, y he llegado a la conclusión de que, en todo proyecto diseñado y desarrollado por nosotros, el dimensionamiento de las magnitudes y el grado de complejidad del sistema de información y dirección son los factores decisivos y, en consecuencia, la perfección omnicomprensiva y absoluta del concepto puede coincidir muy bien en la práctica, incluso, en fin de cuentas, tiene que coincidir con una disfunción crónica y una inestabilidad constitucional".
W.G. Sebald, Austerlitz
sábado, marzo 12, 2011
miércoles, marzo 09, 2011
Fuentes
Ayer era la fuente en mitad del inadvertido patio, verde veronés invitando al reposo.
Hoy era la campana herrumbrosa de la linterna del ayuntamiento, verde cadmio abdicando bajo la lluvia.
(Esta tarde, al buscar un hueco donde apuntar algo en un viejo cuaderno, tu caligrafía me ha estremecido como una aparición).
Los graffiti que dejó la soldadesca del emperador en las paredes de Villa Farnesina durante el saqueo de Roma.
Hoy era la campana herrumbrosa de la linterna del ayuntamiento, verde cadmio abdicando bajo la lluvia.
(Esta tarde, al buscar un hueco donde apuntar algo en un viejo cuaderno, tu caligrafía me ha estremecido como una aparición).
Los graffiti que dejó la soldadesca del emperador en las paredes de Villa Farnesina durante el saqueo de Roma.
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